El ‘superalimento’ secreto del bosque en España: sin calorías, con hierro y más vitamina C que la naranja

La acedera (Rumex Acetosa), conocida como vinagrera o agrilla, debe su nombre al distintivo sabor ácido que la caracteriza. Se trata de una planta que alcanza una altura de medio metro y cuenta con hojas grandes. Su origen se encuentra en Asia y Europa, y prefiere crecer en ambientes húmedos como pastizales y áreas cercanas a pantanos.

Esta hierba es especialmente popular en Europa del Este y forma parte de platos típicos en gastronomías rusas, ucranianas y polacas. En Francia es utilizada para caldos, cremas y como acompañamiento para pescados. Sus hojas también se pueden cocinar al vapor. En España, el plato más popular es la sopa de acedera.

La acedera (Rumex Acetosa), conocida como vinagrera o agrilla, debe su nombre al distintivo sabor ácido que la caracteriza. Se trata de una planta que alcanza una altura de medio metro y cuenta con hojas grandes. Su origen se encuentra en Asia y Europa, y prefiere crecer en ambientes húmedos como pastizales y áreas cercanas a pantanos.

Esta hierba es especialmente popular en Europa del Este y forma parte de platos típicos en gastronomías rusas, ucranianas y polacas. En Francia es utilizada para caldos, cremas y como acompañamiento para pescados. Sus hojas también se pueden cocinar al vapor. En España, el plato más popular es la sopa de acedera.

Además, se puede incorporar de manera excelente en ensaladas de verano y platos frescos, agregando un toque de originalidad y frescura. Eso sí, para sacarles el máximo partido, es importante emplear siempre hojas tiernas y frescas, ya que las hojas maduras y colgantes pueden resultar difíciles de digerir y ocasionar problemas estomacales.

Con estos datos, podemos afirmar que la acedera no solo destaca por su sabor agrio y fresco en la gastronomía, sino también por sus múltiples propiedades para la salud. Esta planta silvestre es una valiosa fuente de antioxidantes que ayudan a proteger nuestras células del daño causado por los radicales libres, contribuyendo a prevenir enfermedades crónicas como las afecciones cardíacas, el cáncer y la diabetes tipo 2.

Además, gracias a su alto contenido de hierro, la acedera es ideal para tratar la anemia ferropénica y otras deficiencias de este mineral. Además, su abundante contenido de vitamina C fortalece el sistema inmunológico. Tiene de 50 a 100 miligramos de esta vitamina por cada 100 gramos, por lo que puede llegar a duplicar la que obtendríamos con una naranja.

Otro de los ámbitos en los que la acedera puede ser de utilidad es el de la salud cardiovascular. Al menos, hacia eso apuntan estudios realizados en animales, que han revelado que el extracto de acedera puede modificar ciertas vías relacionadas con la formación de coágulos sanguíneos, lo que podría ser beneficioso para prevenir problemas cardíacos.No podemos olvidar su acción digestiva, diurética y laxante. Debido a su contenido de fibra, ayuda a tratar problemas intestinales y el estreñimiento. Además, es un excelente depurador de la sangre y se utiliza para tratar heridas debido a sus propiedades antiinflamatorias, cicatrizantes y antisépticas.