Adiós al frío: destinos europeos (como las Islas Canarias) para disfrutar del sol en invierno

Si eres de los que prefieren la manga corta al abrigo, estos destinos soleados prometen cielos azules y precios asequibles sin salir de Europa.

En España, dependiendo de la región, los inviernos son más o menos fríos. Desde las cálidas temperaturas de las Islas Canarias hasta los fríos bajo cero de Soria o Teruel. Por no hablar de las heladoras mañanas salmantinas o el frío cierzo de Zaragoza.

El frío, además de provocar achaques que afectan a los huesos, afecta directamente a nuestro estado de ánimo, con síntomas que van desde el pesimismo o la tristeza hasta la pérdida de interés en actividades con las que antes se solía disfrutar o el aislamiento social y pérdida de energía, según informan desde Cipsia Psicólogos.

Si es tu caso, o si, simplemente, eres de los que prefieren la manga corta al abrigo, estos destinos soleados prometen cielos azules y precios asequibles sin salir de Europa. La mejor opción para escapar del frío sin fundirte tus ahorros.

Islas Canarias, España

Las Islas Canarias tienen un clima agradable durante todo el año con al menos 300 días de sol, aunque existe una gran diversidad climática en cada una de las islas. Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, El Hierro, La Gomera o La Palma, cualquiera que sea tu elegida será un acierto, pero es recomendable tener en cuenta sus peculiaridades.

Uno de los rasgos que caracterizan estas islas es su configuración montañosa, de la que solo se escapan Lanzarote y Fuerteventura. En general, el litoral canario es abrupto y rocoso y los acantilados son las formas más extendidas.

Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura son las que tienen tramos costeros estimables a escala del Archipiélago. Lugares ideales para actividades en el mar, como buceo o surf, o las mejores playas de arena para descansar. Si eres de secano, se pueden hacer rutas para satisfacer tus necesidades.

Marbella, España

Las abarrotadas playas y terrazas de Marbella dejan paso a la tranquilidad fuera del pico de verano. El momento perfecto para encontrar una terraza al aire libre para disfrutar de la puesta de sol a una temperatura que ronda los 15°C.

Además, esta ciudad es conocida por lo caro que resulta todo. Eso sí, en los meses de invierno, como la afluencia es menor, los precios bajan y se convierte en una opción mucho más asequible.

Esta época es también la mejor temporada para viajar a la ciudad andaluza si eres un apasionado del golf o de los paseos. De hecho, los mejores tours que se pueden hacer en Marbella son a pie o en bicicleta. Una idea es recorrer los 15 kilómetros del paseo marítimo. 

Madeira, Portugal

Playas escarpadas entre magníficas montañas, Madeira es una de las islas más exóticas de Europa y cuenta con algunos de los mejores paisajes a unas temperaturas que rondan los 21°C en invierno.

Podrás imaginar que para esas estampas verdes y exuberantes, en la isla portuguesa existe cierto riesgo de lluvia, aunque lo bueno es que no suelen durar mucho.

Sin duda, una opción que disfrutarás, sobre todo, si eres un amante de la naturaleza pueden caminar junto a la zigzagueante red de levadas, canales artificiales creados para transportar agua para el riego de los campos agrícolas de la isla. Funchal, la pintoresca capital de la isla, tiene mucho que ofrecer a sus visitantes, incluida una hermosa arquitectura y una animada vida nocturna.

Sicilia, Italia

Un destino que es un acierto en cualquier momento del año, gracias a su suave clima mediterráneo. Incluso en invierno, sus temperaturas rondan los 16°C con un sol brillante.

Una de las ventajas de visitar la isla en la época invernal es que está menos ocupada que en otros momentos del año, así que podrás disfrutar casi para ti solo de las impresionantes ciudades barrocas.

Para los amantes de la gastronomía, la temporada de erizos de mar (ricci di mare) llega a su apogeo en febrero, y se pueden disfrutar en numerosos restaurantes locales.

Malta

Si quieres un lado de la cultura con el sol de invierno, tu destino es Malta. La isla alberga nueve lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La Valeta es la capital europea más pequeña, con solo 0,8 kilómetros. Las temperaturas de unos 18°C hacen que sea bastante agradable caminar por cualquiera de sus calles.

Entre los planes que se pueden hacer en Malta, es obligatoria la visita a Vittoriosa, Senglea y Cospicua. En cualquiera de estos tres lugares se puede disfrutar del auténtico estilo de vida local, y de una visión de la historia marítima maltesa.

De octubre a marzo, acumula un promedio de 196 horas de sol al mes, que te permitirán explorar sus puertos, pueblos de pescadores, acantilados y calas rocosas, o disfruta de un viaje en barco que te lleve a la vecina isla de Gozo. Allí podrás descubrir los templos de Ggantija, el complejo megalítico más antiguo e impresionante de Malta. 

Chipre

Chipre presume de tener los inviernos más soleados del Mediterráneo, lo que lo convierte en el mejor destino para los amantes de los inviernos al sol con temperaturas que rondan los 17°C. 

El mejor momento para vistar playas como la de Nissi en Agia Napa, que en los meses de agosto está siempre llena de gente. Limassol, Larnaca y Paphos son ciudades que tienen actividad en los meses de invierno. Sus hoteles y restaurantes están abiertos y sus playas tranquilas.

Un clima agradable para pasear y explorar la cultura y la historia de la isla, y perfecto para los amantes del buceo. Los precios son muchos más asequibles, hay menos barcos por lo que lo único que se encuentra en el mar son peces.