El reciclaje de baterías se perfila como un negocio lucrativo.
En la próxima década, podrían ser necesarias más de 300 nuevas minas para satisfacer la creciente demanda de baterías y almacenamiento de energía.
La demanda de tecnologías de energía limpia está impulsando la producción de baterías de litio, fundamentales en vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento de energía. Se prevé que la demanda de estas baterías se multiplique por nueve para el año 2040.
Por esta razón, se espera que la inversión en el sector de baterías supere los 1,45 billones de euros para 2040, con un incremento significativo a casi 515.000 millones para 2030, según un informe reciente de Benchmark Mineral Intelligence. Estas cifras reflejan el capital necesario para generar la capacidad requerida para satisfacer la demanda futura de baterías entre 2030 y 2040. En resumen, se anticipa que el gasto de capital total de la industria de baterías se triplicará en los próximos diez años.
Las empresas del sector se centrarán principalmente en la extracción de litio, níquel, cobre y en el reciclaje. Sin embargo, el reciclaje será el área con mayor potencial de crecimiento.
A futuro, se espera que la etapa final de la cadena de valor de la industria de baterías, que incluye el ensamblaje, integración en productos, distribución y reciclaje, reciba la mayor parte de la inversión. La demanda de materiales reciclados se multiplicará por 26 para 2040, lo que representa el mayor crecimiento proyectado en el informe, con un aumento en el gasto de capital de más de 23.000 millones de euros a más de 142.000 millones, lo que equivale a un aumento por seis de las inversiones.
Según Benchmark, la principal fuente de material reciclable para baterías en la próxima década provendrá de los residuos generados por las gigafábricas. Las baterías al final de su vida útil no se convertirán en una fuente significativa de material reciclable hasta la década de 2030, ya que los vehículos eléctricos que se venden actualmente no serán desechados hasta dentro de unos diez años.
Más de 300 nuevas minas
Dentro de la categoría de componentes de baterías, el cátodo, que almacena la carga positiva durante la descarga, será el principal receptor de inversiones. Se espera que la inversión en cátodos pase de aproximadamente 43.000 millones de euros en 2030 a 142.000 millones en 2040. Asimismo, la inversión en separadores se triplicará, pasando de 35.000 millones de euros en 2030 a 83.000 millones en 2040. La demanda de cobre para celdas de baterías también se quintuplicará para 2040.
Además del reciclaje de baterías, se estima que en la próxima década se necesitarán más de 300 nuevas minas para satisfacer la creciente demanda de baterías para vehículos eléctricos y almacenamiento de energía. En concreto, se requerirán al menos 384 nuevas minas de grafito, litio, níquel y cobalto para satisfacer la demanda en 2035, de acuerdo con el tamaño promedio de las minas de cada material.
La proyección indica que la demanda de baterías aumentará nueve veces de aquí a 2040, lo que resalta la necesidad urgente de expandir la capacidad de producción y asegurar la cadena de suministro de materiales clave.
Economía circular
Estas cifras están en línea con el informe sobre el mercado de reciclaje de baterías de ion litio de Marketsandmarkets.com, que proyecta un crecimiento del mercado a más de 51.000 millones de euros en 2032, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 17% durante ese período.
El mercado del reciclaje de baterías de ion litio está impulsado principalmente por la creciente demanda de materiales reciclados y la adopción de prácticas sostenibles, cada vez más importantes en un contexto de mayor conciencia ambiental y regulaciones más estrictas.
Dado su alto contenido de metales preciosos como níquel, cobalto y litio, las baterías de ion litio se han convertido en candidatas ideales para el reciclaje. Este proceso no solo reduce el impacto ambiental de la producción de baterías, sino que también promueve una economía circular al recuperar estos materiales esenciales y disminuir la dependencia de recursos vírgenes. Este enfoque en la sostenibilidad está impulsando directamente el crecimiento del mercado de baterías recicladas.